Durante el Solsticio de Invierno experimentamos las noches más largas y oscuras del año y los días más cortos con la menor cantidad de luz del día, marca el final del otoño (un ciclo) y el comienzo del invierno.
El solsticio de invierno representa un renacer para la humanidad; “el triunfo de la luz sobre las tinieblas".
Le otorgan a la luz el símbolo de la esperanza.
Hoy en día, en varias partes del mundo viene celebrado, es un tiempo sagrado en la quietud del invierno, que puede ser dedicado para renovar energías, la regeneración y renovación, meditar, reflexionar.
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